En la obtención de los permisos necesarios para el desarrollo de cualquier actividad que pueda generar ruido, será necesario realizar una medición acústica y presentar en el ayuntamiento correspondiente un informe, certificando que el acondicionamiento acústico realizado, es el necesario para cumplir con la normativa exigida.
Al igual manera en ocasiones es beneficioso realizar una medición previa, para determinar la mejor solución de aislamiento acústico, dependiendo de las características del espacio a insonorizar.